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FRESCO-AMADERADO.
Onix es una fragancia poderosa y transformadora, inspirada en la piedra negra y brillante que lleva su nombre. Proveniente de las profundidades de la tierra, el ónix es un mineral considerado mágico, capaz de desviar las energías negativas y purificar el aura de su entorno.
Su apertura enérgica, con las notas de salida de cortezas de cítricos y manzana ácida, aporta un comienzo refrescante pero con una complejidad que prepara el terreno para su evolución.
En el corazón de la fragancia, la lavanda se encuentra con la magnolia en una danza armoniosa que aporta un contraste fascinante entre lo fresco y lo floral.
El fondo de Onix es donde la fragancia toma su fuerza definitiva. El ámbar gris aporta una profundidad cálida y envolvente, mientras que el vetiver y el almizcle añaden una base terrosa y sensual que perdura en la piel.
Para obtener el máximo rendimiento y disfrutar de la mejor experiencia olfativa, simplemente añade unas gotas de tu esencia favorita de Boles d'olor al Brumizador y deja que la tecnología haga su magia.
También puedes aplicar unas gotas en potpourris, cerámicas o cualquier otro elemento decorativo para revitalizar su aroma.
Contenido: 50 ml.